La Plataforma Burgos con Ucrania, constituida por el Consulado de Polonia en Burgos, Castilla y León y Cantabria y organizaciones sociales y empresariales, ha puesto en marcha una campaña de recogida de donaciones económicas para los afectados por la invasión rusa.

Se trata de la primera iniciativa de esta plataforma, que pretende dar cobertura humanitaria a las personas afectadas por la guerra de Ucrania a través de varios proyectos internacionales.

Las donaciones se podrán realizar a través de la página web www.burgosconucrania.com e irán destinadas en su totalidad a proyectos sociales que respondan a la ayuda urgente en la zona del conflicto y la acogida de refugiados.

A través de este enlace, tanto particulares como empresas y organizaciones podrán hacer sus donativos con todas las garantías de seguridad y contando con el certificado oportuno para la desgravación fiscal correspondiente.

De este modo, se pretende dar cumplimiento a los objetivos fundacionales de la plataforma, que nace para prestar apoyo a los bancos de alimentos de Kiev y los países limítrofes a Ucrania y colaborar en la acogida de refugiados, en coordinación con las entidades Burgos Acoge, Accem y Betania.

EMERGENCIA EN UCRANIA

Entre los propósitos de la organización, que ha sido presentada en el edificio Nexo de la Fundación Caja de Burgos, figura también dar respuesta a la emergencia de Ucrania en Moldavia a través de tres centros de acogida y adquirir y enviar proyectos de primera necesidad al país.

También pretende la ayuda a las personas más vulnerables del conflicto en los ocho municipios ucranianos en los que desarrolla su labor el proyecto desarrollado por la orden religiosa Hijas de la Caridad.

La Plataforma Burgos con Ucrania se configura como un grupo abierto a nuevas entidades y empresas que quieran sumarse a su proyecto, basado en las indicaciones marcadas por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

Según las últimas estimaciones de la ONU, desde el comienzo del conflicto bélico el pasado 24 de febrero, más de 3,5 millones de personas han abandonado el país y de ellos, más de la mitad lo han hecho a través de la frontera con Polonia.