La Diputación de Burgos tendrá un presupuesto consolidado de 146,8 millones de euros en 2023, el más alto de su historia, según ha avanzado este martes durante la presentación de las líneas generales de las cuentas del próximo ejercicio el presidente de la Institución provincial, César Rico.

Rico, acompañado de la portavoz provincial de Ciudadanos, Laura Puente, ha explicado que esto es posible debido a la "buena base económica" de la que parte la Diputación, cumpliendo el principio de estabilidad presupuestaria y disponiendo de un amplio margen financiero.

Por ese motivo, ha avanzado que se acudirá a un crédito de 18,6 millones de euros para hacer frente a los cambios derivados de la situación económica actual, entre ellos el incremento del Euríbor.

Junto a esto, ha explicado que se destinará un presupuesto de 5,5 millones de euros a la Sociedad para el Desarrollo de la Provincia de Burgos (Sodebur) y de 4,5 millones de euros al Instituto para el Deporte y la Juventud (IDJ).

César Rico ha destacado además una "apuesta decidida por el ámbito rural" en las cuentas del próximo ejercicio, con el objetivo de mejorar los servicios públicos que se prestan en el territorio.

Planes provinciales

Para ello, ha avanzado que el presupuesto contempla una inversión cercana a los 36 millones de euros a través de planes provinciales, lo que supone una aportación de la Institución provincial de alrededor de 30 millones de euros, dos millones de euros más para los municipios y un millón más para las entidades locales menores.

Por otro lado, ha explicado que el proyecto presupuestario prevé un aumento de las retribuciones de los empleados públicos y un aumento del 7% en el capítulo de gastos y servicios, fundamentalmente por el elevado incremento de la inflación.

Asimismo, ha confirmado una partida de 3,5 millones de euros para carreteras provinciales, medio millón menos que en el actual ejercicio, bajo un criterio de "prudencia" y evitar así que se acumulen planes o inversiones sin ejecutar y que están pendientes de hacerlo.

Por primera vez, ha explicado Rico, se acudirá también a una gestión anticipada de las subvenciones para disminuir los remanentes acumulados que pasan de un año a otro, algo que también se hará con las partidas que se destinan a la conservación de iglesias.