El Ayuntamiento de Burgos restructurará el Cuerpo de Policía Local para atender las demandas de los agentes y adaptar la plantilla a las nuevas necesidades de la ciudad, según ha avanzado este martes la concejal de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero.

Carpintero, acompañada de la edil de Personal, Nuria Barrio, ha explicado que el principal cambio se producirá con la distribución policial en dos direcciones operativas, a través de las que dar respuesta a diferentes secciones.

Así, se creará una Dirección de Gestión Técnica y Conocimiento y una Dirección Operativa, que dará cabida a unidades de Medio Ambiente y Administración, Seguridad Ciudadana, Viogen y Gestión de la Biodiversidad y Policía Judicial e Investigación de Accidentes.

Blanca Carpintero ha explicado que, de este modo, se logrará una "Policía de futuro", que echará a andar el próximo 1 de enero, después del trabajo realizado en los últimos meses para alcanzar un acuerdo con el Cuerpo.

Dicho acuerdo, cuyas pautas ha desgranado Nuria Barrio, pone fin a las reivindicaciones de los policías, que les han llevado a manifestarse en diferentes ocasiones para reclamar mejoras salariales dentro de la nueva restructuración.

Jornadas laborales

La mesa de negociación ha determinado jornadas de doce horas los jueves, viernes y sábados para algunos policías, dada la carga laboral de estos días de la semana, y una ampliación a cuatro horas las jornadas de disponibilidad, todo ello sin aumentar las horas laborales anuales.

A falta de una mejora en la relación de puestos de trabajo, Barrio ha adelantado que el incremento salarial estará recogido en las cuentas municipales de 2023, a la vez que ha explicado que se fijará la obligatoriedad de dos prácticas de tiro y la permanencia de efectivos mínimos en unidades como la Sala de Operaciones del 112, Distritos o Protección Ciudadana.