El consejero de la Presidencia de la Junta de Castilla y León, Luis Miguel González Gago, destaca una iniciativa "centrada en el debate teórico"
La Junta de Castilla y León defiende la posibilidad de que los horarios de la hostelería puedan "relajarse" en verano, coincidiendo con las fiestas patronales de numerosos municipios en la Comunidad, pero reconoce que faltan efectivos de Guardia Civil si bien la competencia en seguridad ciudadana recae en el Estado.
El portavoz del Gobierno autonómico, Carlos Fernández Carriedo, ha respondido a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno a las críticas de la asociación profesional Justicia para la Guardia Civil (JUCIL) por la modificación de la orden que permite a los municipios liberalizar los horarios de hostelería siete días al año, recoge EFE.
Fernández Carriedo ha reconocido que elegir los horarios es "muy complicado" ya que debe encontrarse un equilibrio entre el derecho al descanso de los vecinos y el ocio y el deseo de fiesta, así que le parece razonable que algunos días al año, coincidiendo con las fiestas patronales y en verano, "se establezca algún relajo en los horarios". Que haya periodos de apertura de la hostelería más amplios, que se relajen costumbres, aunque siempre respetando el descanso de los ciudadanos, y ahí encaja la nueva normativa que permite a los municipios elegir siete días al año en los que ampliar los horarios de cierre, coincidiendo con celebraciones.
JUCIL ha denunciado que la Junta de Castilla y León ha tomado esa decisión sin contar con ellos, ni con cualquier otro experto en seguridad, ha avanzado que será "muy difícil" garantizar la seguridad en los pueblos durante sus fiestas dada la situación de falta de personal que sufre la Guardia Civil.
Una inquietud que la Junta comparte, ha asegurado el consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, quien ha recordado que la competencia en materia de orden público es exclusiva del Estado, pues las policías locales pueden colaborar o apoyar pero la responsabilidad es de Policía Nacional y Guardia Civil.
De ahí que González Gago haya apuntado que el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, debería haber reunido a todos los subdelegados provinciales para coordinar la seguridad ciudadana "en lugar de dedicarse a pasearse por las capitales de provincia sin saber muy bien con qué finalidad".
Por su parte, Fernández Carriedo ha reconocido que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que "merecen respeto y consideración", no tienen medios suficientes y le corresponde a la Delegación del Gobierno establecer los mecanismos más adecuados para garantizar la seguridad. "No es nuestra competencia dirigir a la Guardia Civil o a la Policía Nacional", ha reiterado el portavoz autonómico, ni organizar operativos o mecanismos de respuesta.
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