El Pleno del Ayuntamiento de Burgos ha aprobado este viernes en sesión ordinaria una nueva modificación presupuestaria por un importe superior a 8,2 millones de euros, que el equipo de Gobierno local ha calificado de "muy necesaria".

La modificación presupuestaria ha salido adelante con los votos de la coalición de gobierno del PSOE y Cs y el rechazo de los grupos municipales del PP, Vox y del concejal no adscrito Julio Rodríguez-Vigil y la abstención de la Agrupación Municipal de Podemos.

El concejal de Hacienda, David Jurado, ha lamentado que a la oposición "no le guste que gobierne el equipo de Gobierno", a la vez que ha justificado esta modificación en las necesidades sobrevenidas.

Jurado ha insistido en que estas situaciones se derivan de "cosas que pasan" y de una falta de mantenimiento "total y absoluta" de algunas instalaciones, durante los años de gobierno del Partido Popular.

Las palabras del edil socialista han contado con el apoyo del vicealcalde y portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos, Vicente Marañón, quien ha defendido el carácter "necesario" de la modificación, tanto en tiempo como en forma.

Marañón ha explicado que algunas de las partidas asociadas a la modificación hacen referencia a ámbitos estratégicos como el cultural o la movilidad, por lo que ha asegurado que no cree que existan "motivos de peso" para oponerse a ella.

Críticas de la oposición

La portavoz del Grupo Municipal Popular, Carolina Blasco, ha rechazado dicha modificación, que considera un reflejo de la gestión del bipartito, tanto en "oscurantismo" como en "carácter irregular".

Blasco ha reconocido que algunas de las partidas son "razonables" porque se devienen de circunstancias sobrevenidas, pero ha advertido al alcalde, Daniel de la Rosa, que muchas de las partidas contempladas en la modificación se conocían de antemano y podían haberse incluido en el presupuesto municipal, a la vez que ha denunciado que otras se impregnan de un tono "muy irregular".

Por su parte, el portavoz del Grupo Municipal de Vox, Ángel Martín, ha insistido en que algunos capítulos previstos en la modificación "no tienen explicación" y ha cuestionado el incremento del convenio vigente con la Universidad de Burgos, cuyo importe se ha multiplicado por cuatro, al considerar que este importe no debe recaer únicamente en las arcas municipales.

Finalmente, la portavoz del Grupo Municipal de Podemos, Marga Arroyo, ha recordado que un presupuesto debe tener un carácter preventivo, algo que a su juicio no sucede bajo la gestión del PSOE y Cs, y ha aprovechado su intervención para reclamar una mayor partida para la Asociación de Rehabilitados del Juego Patológico, a la que los socialistas se habían comprometido.