La lluvia marcó el ritmo, pero no la esencia de uno de los actos más emblemáticos de la Semana Santa burgalesa
El IMC posibilita que haya un Rey de las Fiestas en los Sampedros 2019
El Consejo rebaja el número de participantes mínimo para facilitar que se presenten candidatos.
Las Fiestas de San Pedro y San Pablo 2019 podrían tener, por primera vez en la historia, Rey y Reina Mayor. Ese es, al menos, el objetivo de los grupos municipales, que este miércoles han aprobado una modificación en las bases del concurso para rebajar el mínimo de participantes de 15 a 10.
El motivo por el cual se ha adoptado esta decisión es porque, a pesar de que el certamen se abrió a los chicos desde el pasado año a propuesta del Grupo Municipal Socialista, no hubo candidatos suficientes en las peñas que se animaran a dar el paso.
Sin embargo, este año ya había un total de 11 candidatos a Rey Mayor y otros 10 a Rey Infantil, aunque seguían siendo insuficientes, ya que las bases marcaban un mínimo de 15. Con esta medida se abre la posibilidad, si bien aún deben dar el paso defenitivo los participantes.
POLÉMICA CON LAS FIESTAS DE LOS BARRIOS
En otro orden de cosas, el consejo del IMC de este miércoles no ha estado exento de polémica. PP, Imagina y C's han votado a favor de una iniciativa del Equipo de Gobierno para que sean los barrios, a título individual, los que organicen sus fiestas y no el Ayuntamiento, como se viene haciendo hasta ahora. Una decisión que ha criticado duramente el PSOE.
La concejala socialista, Nuria Barrio, ha advertido de que con esta medida el Ayuntamiento se desentiende de cualquier tipo de obligación organizativa de estas fiestas, teniendo que ser las personas a título individual quienes asuman los costes y la responsabilidad civil en caso de incidente, lo cual ha calificado de "sinsentido".
El Arzobispo Mario Iceta impartió la bendición final, dedicando unas palabras de consuelo y esperanza dirigidas a los enfermo
Las laderas del Castillo acogieron el acto de meditación y oración
La procesión, una de las más simbólicas de la Semana Santa burgalesa, se celebró con gran asistencia pese al frío