La Guardia Civil de Burgos ha detenido a M.E.J., de 37 años y a Y.L., de 46 años como presuntos autores de 29 delitos de hurto y un delito de robo con fuerza, todos cometidos en el interior de vehículos estacionados en áreas de servicio y descanso de la AP-1, y como miembros de un grupo criminal que se dedicaba a llevar a cabo este tipo de delitos.

Los agentes habían detectado una serie de robos y hurtos en el interior de vehículos que paraban en las estaciones de descanso y servicio anexas a la AP-1 e investigaba los hechos desde el pasado diciembre, según ha informado el cuerpo de seguridad en un comunicado remitido.

Este grupo criminal actuaba mediante la distracción de los ocupantes de los vehículos o esperaban un descuido de estos para sustraer objetos de valor, bolsos y maletas y se desplazaba, según se ha podido saber durante la investigación, en varios turismos ligeros que pasaban desapercibidos.

En respuesta a estas acciones y al Plan Turismo Seguro que puso en marcha el Ministerio del Interior, el Equipo de Policía Judicial de Miranda de Ebro abría, meses atrás, una investigación en el marco de la Operación 'Aliyugo 2'.

En este aspecto, sobresalían las denuncias de turistas extranjeros en tránsito por las áreas burgalesas de Miranda de Ebro, Pancorbo, Ameyugo, Briviesca y Quintanapalla, aunque la Guardia Civil sospecha de su presencia en las provincias de Álava y La Rioja también.

La Guardia Civil realizó vigilancias y seguimientos discretos, así como entrevistas para recabar información sobre el perfil de la banda y sus integrantes, de origen árabe, que una vez analizada y cotejada llevó a los investigadores a la identificación de los autores.

Una de las "principales dificultades" con las que se han encontrado los investigadores, aparte de su movilidad geográfica, ha sido el frecuente cambio de vehículos, para dificultar su identificación y seguimiento. Días atrás se les detuvo en una estación de servicio mediante la intervención del vehículo y uno de ellos ya ha ingresado en prisión.

La Guardia Civil ha informado de que hay una "notoria" disminución de denuncias por este tipo de delitos, por lo que considera "parcialmente desarticulado" el núcleo de la banda, aunque la operación aún no se ha cerrado y no se han descartado nuevas detenciones.