La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, ha manifestado hoy su intención de detener el proyecto Burgos Río propuesto por la administración anterior, argumentando que se trata de una obra de gran envergadura y excesivamente costosa. Ayala ha dejado en claro que no considera necesario llevar a cabo una obra de tales dimensiones, que podría alcanzar un presupuesto de hasta 14 millones de euros, ya que no beneficiaría a Burgos. En cambio, su intención es realizar proyectos que sean realmente necesarios y útiles y por ello tienen la intención de frenar el avance de esta iniciativa presentada en su momento por el ex vicealcalde Vicente Marañón.

De esta manera, el objetivo del PP es continuar con la primera fase del proyecto Burgos Río, en la cual se presentaron 5 propuestas por parte de diversas empresas, cuya selección se llevaría a cabo en septiembre, eligiendo finalmente 3 en octubre y un ganador definitivo en enero. Esta etapa inicial del plan requeriría 300.000? provenientes de fondos europeos, distribuidos de la siguiente manera: 80.000 euros para cada finalista, 60.000 euros para el ganador y 30.000 euros para cubrir los gastos de desplazamiento del jurado.

Ayala sostiene que, en caso de no continuar con esta primera fase valorada en un total de 1,4 millones de euros, el dinero proveniente de los fondos europeos se desperdiciaría y se perdería para el ayuntamiento, desaprovechando una suma importante que podría destinarse a otras obras o infraestructuras de mayor necesidad para los ciudadanos.

En este sentido, la alcaldesa ha afirmado que podrían aprovechar algunas ideas del programa Burgos Río, pero ha presentado sus propias ideas relacionadas con la ribera de los ríos Arlanzón y Vena, que le gustaría llevar a cabo durante su mandato. Las más necesarias la limpieza de las riberas y la remodelación de algunas pasarelas pero ha indicado que es un proyecto que irá a largo plazo.