El Tenerife marcó dos goles en la segunda parte pero fueron anulados
El Burgos da otro paso hacia la salvación asaltando el Helmántico
Un solitario tanto de Goti da la victoria a los de Estévez ante el Salamanca CF y el equipo vuelve a salir del descenso.
Ganar por la mínima con un tanto marcado en los primeros minutos se ha convertido en una tónica habitual para el Burgos C.F. en el último mes. El conjunto dirigido por Fernando Estévez ha logrado tener la confianza suficiente para saber aprovechar sus ocasiones y guardar la ropa cuando vienen mal dadas. Así, los blanquinegros asaltaron el Helmántico ante un rival directo como el Salamanca CF para volver a sumar tres puntos tras la dura derrota sufrida ante el Unión Adarve. Bastó un gol de Goti para conseguir la victoria y salir nuevamente del descenso.
Y eso que empezó con las ideas más claras el conjunto charro y con ganas de mandar en el verde. Estévez apostó por el mismo esquema que tan buenos resultados le está dando en las últimas jornadas, pero con los cambios pertinentes por las diferentes bajas sufridas en los últimos días. Owusu fue un quebradero de cabeza para la zaga visitante y gozó sin suerte de dos claras ocasiones para hacer el primero.
La fortuna sonrió al Burgos en el minuto 15 tras una mala salida del balón de los locales. Jagoba recuperó en tres cuartos de campo para filtrar el balón a Cervero, que dribló al guardameta y remató cruzado para que Goti, en boca de gol, terminara de introducir el esférico en la portería para poner el 0-1. Llegaron entonces los mejores minutos del cuadro blanquinegro -hoy de morado-.
De hecho, Borda tuvo en su cabeza el 0-2 apenas diez minutos después del primer tanto de los burgaleses, pero su remate se fue rozando el larguero de la meta defendida por Sotres. El portero local volvió a salvar a los suyos al borde del descanso tras detener un disparo raso de Chevi.
Tras la reanudación, llegó el momento de apretar los dientes. Los charros salieron decididos a empatar la contienda y al Burgos le tocó defender con uñas y dientes la ventaja. Asdrúbal, que salió nada más comenzar la segunda mitad, era una amenaza constante para una defensa visitante que sufría más que en los primeros 45 minutos.
Los burgaleses apenas pisaban área rival y, cuando lo hacia, era con remates tímidos y sin apenas peligro para Sotres. La entrada de Adrián Cruz le dio aire a un Burgos que cada vez estaba más encerrado en su área, pero que sabía medir el tempo del partido. La ocasión más clara para el Salmantino fue una falta lanzada por Galván que obligó la estirada de Saizar para evitar el tanto.
El tramo final del encuentro fue de infarto, con la zaga del Burgos achicando agua constantemente y con un equipo charro totalmente volcado. Sotres subió a rematar las dos últimas jugadas del partido, pero ni por esas dio su brazo a torcer el conjunto de Estévez, que celebró con rabia cuando el árbitro decretó el final del encuentro.
Victoria que permite respirar de nuevo a un Burgos que tiene otra cara y que tiene muy claro a lo que juega. Es momento para volver a conseguir una victoria que le de otro empujón hacia arriba y será otro equipo salmantino, el Guijuelo, que cuenta con 3 puntos más que los blanquinegros.